Algo que quizás no valoremos de una forma importante es, el «feeling» con vuestro fotógrafo de boda. A la hora de buscar y valorar a un profesional para que inmortalice el gran día, no solo debemos pararnos en el estilo o el precio, si bien es verdad que lo que solemos hacer, es un equilibrio siempre que podamos entre calidad y precio.
Buscando nuestro estilo como clientes de fotografía de boda.
Nos volvemos locos en muchos casos mirando un sinfín de fotógrafos en un sinfín de webs con fotógrafos de boda, yo siempre digo que no existen mejores o peores fotógrafos… eso es algo muy personal y subjetivo y es verdad que existen fotógrafos muy conocidos dentro de la profesión que no son especialmente baratos, las tendencias y las modas hacen mucho comercialmente, aun así no hay mejores y peores siempre y cuando lleguen a un estándar de calidad profesional claro, lo que tenemos que ver es que ese es el estilo que nos agrada, por suerte la digitalización en la fotografía de boda a dado como finalidad un amplio abanico de posibilidades estilísticas según el profesional de la imagen que visitéis, aunque a muchos todavía les pueda sorprender, hay gente que sigue buscando la fotografía de boda clásica con posados y tradicionales efectos y escenarios, mientras que otros buscan algo nuevo y moderno y dentro de esa modernidad un estilo que pueda diferenciarse del resto, y es ahí donde tenemos que hacer un primera selección, aun así un buen profesional se debe a su cliente y sabrá entregar un trabajo del estilo que pida su cliente, eso sí, la forma de mirar siempre será diferente entre varios profesionales.
Seleccionando a nuestro de fotógrafo de boda.
Una vez hecha la primera selección viene el tema económico y ahí si que no puedo decir mucho porque cada uno sabe que economía tiene, simplemente como apunte decir que tenemos que desconfiar de «profesionales» que cobren menos de 1200€ incluyendo álbum, tenemos que saber que un fotógrafo tiene una profesión liberal y que son muchos los impuestos y gastos a los que tiene que hacer frente, maquinaria especializada, ordenadores, discos de seguridad, seguros, publicidad, formación continua, paginas web y mantenimiento y un largo etc, ademas el día del evento suele ser un día de fin de semana y son muchas horas seguidas con atención y stress por no perder nada, y todo eso hay que valorarlo. Os dejo aquí una entrevista que me hicieron en el Heraldo de Aragón sobre los estilos fotográficos ademas de dar algún apunte sobre los precios en esta profesión. Entrevista.
El «feeling»
Una vez hecha la selección, yo recomiendo no mas de cuatro, lo mas importante ahora será poder citarnos con nuestro posible fotógrafo de boda, en ese momento es cuando vamos a solventar nuestras dudas técnicas y sobretodo personales, contratar a un fotógrafo de boda o el servicio de un fotógrafo no es como comprar una lavadora a la que podemos ir al sitio donde mejor precio nos den, en este caso debemos de notar si sintonizamos con el fotógrafo, si es agradable y si en caso extremo y/o ficticio sabes que podríais ser amigos en un futuro, resumiendo, valorar la personalidad, de nada sirve que sea el mejor fotógrafo de bodas del mundo si sales por la puerta de la cita diciendo que es un desagradable, el día de la boda estará con vosotros muchas horas y casi mas que la familia, y en muchos casos solemos daros alguna directriz para fotografiaros y si el tipo es un desagradable os puede hacer el día un infierno.
Un fotógrafo en casi todas sus disciplinas aparte de arte y trabajo debe de tener también mucha psicología y saber estar y si ademas es buen profesional y la relación calidad precio encajan, enhorabuena, habéis encontrado a vuestro fotógrafo de boda.